Resumen
Un calígrafo es contratado por Voltaire, ya anciano, para que abra su correo y conteste la correspondencia. Esto le llevará a vivir numerosas aventuras y a realizar difíciles trabajos, ya que "todo lo que sirve para escribir, también sirve para matar".
El autor ha ambientado la novela en la época de la Revolución Francesa, y su protagonista teme que se acerque el fin de la caligrafía, sitiada por la imprenta. La obra está muy elaborada, lo mismo que las metáforas y recursos de fondo. Ingenio, sorpresa, aseveraciones audaces, intriga y elementos fantásticos dan a la novela una cierta complejidad. A lo largo de la acción aparecen unos monjes ocupados en actividades mundanas, pero su conducta es claramente un mero elemento literario. El estilo es escueto pero expresivo y de léxico variado.