Resumen
Un anónimo remitente, trasunto del autor, escribe a la madre, a la amada, al hijo y a R.L. Stevenson unas cartas en las que recuerda que con todos estos seres queridos le ha unido, desde largo tiempo atrás, el amor a los libros, a las palabras, a la emoción de leer. La obra, muy breve, se completa, a modo de apéndice, con otra dirigida a quien haya leído el libro. El conjunto forma un buen ejemplo de literatura epistolar que transmite un apasionado alegato en favor de la lectura como medio de enriquecer la propia vida y los sueños ajenos, a base de contar historias leídas y disfrutadas.