Resumen
El joven aprendiz de mago Septimus y su hermana inician una búsqueda peligrosa para rescatar a dos amigos, atrapados en la Casa de los Foryx, un lugar fuera del tiempo donde todas las épocas se encuentran. Por otro lado, el enemigo de Septimus, ahora que ha conseguido el anillo de las dos caras que le hace indestructible, aprovecha para vengarse de él con un fuerte conjuro. En este cuarto libro de la saga fantástica de Septimus lo destacable es el elemento imaginativo y la personalidad de los protagonistas, simpáticos, valientes y leales, cuya vida se desarrolla en el Castillo, poblado de todo tipo de fantasmas buenos y malos con los que conviven con gran naturalidad. Escrito con estilo cuidado, toques de humor, cierto suspense y poca acción, la trama, sin embargo, es confusa y poco coherente con la edad a la que va dirigida: el tema es propio de un libro infantil, pero la complejidad de personajes, lugares, acciones paralelas, saltos en el tiempo, hacen difícil coger el hilo narrativo y puede aburrir su lectura. Parece otro intento de emular a Harry Potter, aunque a bastante distancia.
