Resumen
Megan Maxwell regresa con una
novela sentimental titulada
El día que el cielo se caiga que arranca en 1979 y termina en el año 2000 cuya acción se desarrolla entre Madrid y Barcelona. Los padres de Nacho mueren cuando él tiene siete años y es adoptado por la familia de Alba y sus hermanos donde reina un clima de cariño de forma que es uno más entre ellos. Desde el principio mantiene gran complicidad y confianza con Alba hasta que se separan con la boda de ella y el viaje de Nacho a Londres. Allí él vive en pareja con su amante inglés que acaba falleciendo de SIDA. Poco después se reencuentran tras duros acontecimientos: Alba se ha separado de su esposo y mantiene relaciones sexuales efímeras mientras Nacho está desconsolado por la muerte de su novio; los dos se cuentan sus penas e intimidades y éste le revela su condición de homosexual y su enfermedad. Con ocasión del inicio de su tratamiento médico Alba conoce a Víctor, un divorciado con una hija que la odia, saturada de las numerosas mujeres que ha habido en la vida de su padre. Los problemas familiares no faltan en la familia: la muerte de sus abuelos, el violento distanciamiento de un hermano horrorizado por la conducta de Nacho, etc. Alba y Víctor sintonizan cada vez más y entre ambos surge un amor apasionado. La autora cierra el relato con un agridulce desenlace.
La obra está presidida de principio a fin por un marcado sentimentalismo que agosta la pretensión de M. Maxwell de ofrecer un canto a la amistad y a los lazos familiares ya que el exceso de emotividad hace que la historia resulte empalagosa. Una trama convencional va de la mano de unos personajes dibujados con superficialidad y todo está conducido por una voz en tercera persona bastante pobre en registros narrativos que no sean la simpleza de los diálogos y las referencias a la permisividad en las relaciones amorosas. A lo largo de la novela se hace cierta apología de la homosexualidad a la vez que se desprecia la fidelidad matrimonial, se defiende el sexo sin compromiso y se ataca a la Iglesia tachándola de oscurantista en temas de moral. Todo con el mismo tono ligero y epidérmico en el que trascurre la novela.
Megan Maxwell es el nombre utilizado por una autora española de origen alemán, de cuyo verdadero nombre sólo se conoce el de pila, Carmen, gran representante del subgénero chiklit.
