Resumen
A mediados del siglo XVII, un judío astrólogo regresa a su Praga natal tras muchos años de ausencia. Ya moribundo, escribe una larga carta a su hijo, al que abandonó, lo mismo que a su mujer, para dedicarse a sus estudios y, sobre todo, a la guerra de los Treinta Años, que por aquel entonces asolaba la Europa Central.
La autora, periodista (n.1969), ha tomado un fondo histórico con personajes y sucesos reales para reflejar, sin intención de veracidad, diferentes aspectos de la época. La recreación de la vida en Praga, la relación entre alquimistas y astrólogos entre sí y con otros sabios, algunas escenas de la guerra, están tratadas de forma colorista. La autora realiza muchas divagaciones psicológicas y pseudofilosóficas que con frecuencia no concluyen en nada. Equipara la consulta de los astros con presagios divinos y considera que la Iglesia y los cristianos son unos intransigentes. Por otra parte, la figura del protagonista resulta bastante convincente con todos sus errores y, sobre todo, sus desengaños e infortunios, al hacer el balance final de su vida. El estilo es cuidado y ágil, con descripciones entretenidas, en las que no faltan referencias a cierta permisividad sexual.