Resumen
Estimado señor M. es una
novela de intriga protagonizada por un escritor maduro cuyo libro más vendido se basa en un suceso real, ocurrido mucho tiempo atrás. La desaparición de un profesor de instituto, que había mantenido una breve relación con una alumna, lleva a la policía a sospechar del novio de ésta como culpable de su muerte. Años después, el novelista se traslada a vivir, con su segunda mujer y su hija de tres años, a un edificio residencial ignorante de que su vecino del piso inferior fue en su primera juventud el acusado de haber cometido aquel delito.
Herman Koch (Arnhem, Holanda, 1953) es uno de los escritores holandeses de mayor éxito internacional.
La obra narra, en planos alternos, la versión de aquellos hechos según el punto de vista del que entonces fue el principal sospechoso y la vida presente del que se inspiró en ellos para escribir un auténtico ?bestseller?. La circunstancia de que el vecino de abajo reconozca al novelista, denominado ?señor M?, mientras que éste no le identifica a él, constituye el eje temático sobre el que gira el planteamiento argumental. La trama, muy compleja, se centra en un ajuste de cuentas, cuyos términos se ocultan hábilmente al lector hasta las últimas páginas. Para dar mayor relieve a la supuesta desaparición del profesor, aunque su cuerpo nunca fue encontrado, se incorpora a la acción una sutil crítica de ciertos aspectos del mundo literario actual, sobre la que planea el recuerdo explícito del conocido relato de Truman Capote titulado ?A Sangre Fría?. El clima sombrío que caracteriza a la ambientación y la forma en que uno de los dos personajes centrales acosa al otro, que no se apercibe de sus intenciones, si bien pone de relieve la habilidad narrativa del autor, resulta un tanto obsesiva y morbosa. El lector deberá hacer el esfuerzo de permanecer muy atento a cada secuencia argumental para no perder el significado de las informaciones recogidas, importantes para comprender el sentido de los acontecimientos. En cambio, el estilo, ágil, directo y de fácil lectura compensa en parte esta exigencia. En el contenido del relato queda reflejado el sentido materialista de la vida común a los distintos personajes, y la importancia que, dentro de este esquema existencial, cobra el instinto sexual, dentro de una sociedad que ignora la trascendencia del hombre más allá de la muerte y prescinde de la consideración moral de su conducta.
