Resumen
La tercera parte de la saga de los Fallen Angels mantiene su calidad gráfica en un nivel bien alto. Una vez más, la historia se pone más interesante, haciéndonos conocedores de secretos de algunos personajes con los que ya estamos familiarizados y conociendo a otros nuevos. Nos cuentan en un flashback cómo Dark Angel es dañado y termina teniendo las alas oscuras, y el comportamiento en la actualidad de Bel, hijo de Satán, y Dark, ha cambiado desde que estuvieron juntos. Bel continúa con su lucha para ganar la apuesta que hizo su padre con Dios, y secuestra al ángel oscuro. Todo ello se complica el entrar en acción Lucy Fer, hija de Satán, repudiada del reino por no poseer poderes espectrales, pero que lleva consigo un arsenal escondido en su pelo. Finalmente, Dark adopta una forma siniestra, para después volviendo a su estado normal: creen que es el apocalíptico, que hará que todo termine para volver a empezar. Mientras esto ocurre, Lucy Fer aprovecha para raptar a su hermano Bel para chantajear a su padre y así conseguir el control del Infierno, y Dios ha enviado a La Tierra a Pitt, un ángel encargado de la Academia de Ángeles en el cielo, para vigilar a los tres ángeles protagonistas. ¿Qué apuesta hay entre Dios y Satán? ¿Vencerá finalmentel el bien o el mal? Y lo que es más intrigante ¿quién es bueno y quién es malo?<
