Resumen
A finales de la década de los años 40, el hijo único de un acomodado ganadero es acusado y condenado por un crimen que no cometió: la muerte de un vecino, hacia el que sentía manifiesta animadversión. Tras varios años de cárcel consigue fugarse, se instala en una pequeña ciudad portuguesa próxima a la frontera y acaba entregándose. Pero, temiendo volver a verse encerrado, impulsivamente echa a correr y la policía dispara contra él. Esta edición lleva prólogo de Julio Llamazares y un capítulo final de su hijo J.M. Lacruz Bassols en el que, entre otras reflexiones, indica que el texto de la novela se ha fijado a partir de tres manuscritos distintos. El autor presenta a un personaje de carácter intemperante, torturado, siempre insatisfecho y con un sentimiento de culpa que se agrava paulatinamente, aun cuando, con nueva identidad, rehace su actividad, que no su vida, pues su endurecimiento, su aislamiento... hacen que su vivir sea una condena peor que la cárcel. El autor introduce numerosos personajes, aunque sólo el protagonista queda perfilado psicológicamente. Hay una breve escena erótica y varias referencias a Dios no muy acertadas. El estilo narrativo, seco y escueto, y el tono de desesperanza que tiñe toda la trama hacen que el libro no resulte de grata lectura.
El editor y novelista Mario Lacruz Muntadas (Barcelona, 1929-2000) debió escribir a principios de los años 50 esta obra, segunda parte de una trilogía que comenzó con "La tarde" y terminó con "Barbará", aún inédita, como otros muchos escritos hallados a su muerte.
