Resumen
Chieko sabe que ha sido recogida por sus padres actuales bajo un cerezo en flor. Alguien la dejó allí y ellos la cogieron, se la llevaron y la hicieron legalmente hija suya. Su padre hace diseños de obis: la faja ancha que se lleva sobre el kimono. En un paseo para contemplar las hojas de los arces su hermana melliza la descubre. Chieko desconocía que tuviera una melliza y esto la sume en un gran desconcierto. Los padres de Chieko no pueden tener más hijos y ahora desean que ella se case. Chieko desea obedecerles en todo y tiene pocos proyectos que elabore por sí misma.
La novela es un relato en el que la naturaleza tiene un gran protagonismo. Avanza lentamente con escasas palabras que cobran gran importancia así como los sentimientos que muestran. Kawabata ensalza Kioto, donde transcurre la narración. Dota a la ciudad de personalidad propia, con su gran belleza, sus jardines de cedros y alcanfores, santuarios y festivales de los que relata morosamente sus detalles. Cada estación sugiere un estado de ánimo y la mezcla de cosas occidentales con las tradicionales japonesas hacen que la turbación y la duda sean constantes. El sentido de los dibujos que el padre de Chieko realiza son tan simbólicos como las violetas que crecen en la base del arce o las ramas que se entrelazan: cada flor y cada árbol contienen un mensaje que cada personaje se esfuerza por interpretar. La delicadeza y, a la par, la facilidad para herir los sentimientos consiguen que cada palabra sea como un dardo que llega al corazón. Kawabata construye un relato en el que los personajes, por su suavidad y dulzura, por su sensibilidad y fragilidad, pueden ser fácilmente lastimados.
