Resumen
En una isla cuya población está regida por un régimen puritano muy estricto aparece, víctima de un naufragio, una joven cuyo oficio es narrar historias. Las autoridades del lugar, donde está perseguido el soñar, la consideran una peligrosa delincuente por el ejemplo pernicioso que ofrece. La obra, bien escrita, defiende los libros y la capacidad de fabular de quienes los escriben como una puerta abierta a la libertad de espíritu y a la creatividad artística.