Resumen
Es un relato muy corto, construido en forma de poema y calificado por su autor como "una agonía en ocho paroxismos". Corresponde a la época de madurez de Lewis Carroll y fue escrito diez años después de "Alicia en el país de las maravillas", la obra que ha dado fama universal a su autor.
Esta obra se mantiene en la misma línea de "non sense" que caracteriza la producción literaria de Lewis Carroll. Su gran ingenio y su desbordada fantasía le permiten elaborar unas narraciones sobre la aparente catarata de juegos de palabras, acoplados con gracia y musicalidad e hilvanados como en el juego de los despropósitos. En ellos se pueden introducir diversos planos interpretativos, cargados de oscuros simbolismos que, en el caso de este cuento, es una visión entre ridícula y trágica del desorden que se produce en la mente humana antes de morir. Para muchos lectores, las narraciones de Carroll no pasan de ser una sarta de divertidos disparates graciosamente encadenados.
El cuento como tal no tiene inconvenientes de tipo ideológico; sin embargo, conviene tener en cuenta la actual revisión de la obra literaria de Lewis Carrol en base al posterior surrealismo, del que se le quiere considerar antecedente, enfocando en este sentido su obra con criterio psicoanalista.
