Resumen
Novela de intriga en la que los tortuosos manejos de un lord arruinado para apoderarse de la herencia de su mujer se mezclan con el secreto de su pasado y la aparición misteriosa de una joven vestida de blanco. El autor (Londres, 1820-1889) es considerado como precursor del género policíaco y alcanzó en vida notable éxito.
La obra es un ejemplo clásico de la novelística inglesa del siglo XIX. En ella se mezclan el cuadro de costumbres en un marco aristocrático y refinado, la trama sentimental y la tensión dramática provocada por la turbia conducta de dos personajes sin escrúpulos. La acción resulta demasiado lenta y el estilo ampuloso en exceso de acuerdo con los gustos actuales, pero la habilidad narrativa del autor y lo sugestivo de la ambientación conservan todavía su efectividad. A pesar de algunos pasajes reiterativos y de las muy prolijas descripciones, el planteamiento argumental encierra suficiente variedad y atractivo como para que el lector se sienta atraído por los múltiples elementos que combina la acción.
Los protagonistas viven, paralelamente, una historia amorosa y una intriga en que intervienen motivaciones económicas y espionaje. Las dos ponen a prueba la rectitud de su conducta y la firmeza de sus principios, pero en ambos casos actúan de forma absolutamente correcta. El autor no se ha limitado a darles una moral convencional y de apariencias, sino que ha hecho de ellos ejemplo auténtico de honestidad y virtud. Como réplica, los implicados en acciones reprobables reciben una calificación ética negativa y pagan con la vida las consecuencias de su maldad.