Resumen
En
La Regata,
Manuel Vicent narra la intrahistoria de una imaginaria competición náutica en la que participaban varios lujosos barcos de vela, que se habría celebrado a primeros de agosto de 2016.
El Club Náutico de una localidad alicantina de nombre ficticio pero fácilmente identificable como Denia, era el punto de partida de un recorrido que incluía las islas de Ibiza, Córcega, Menorca y Mallorca para regresar al punto de partida. La novela centra su desarrollo argumental en los rasgos definidores del carácter de los tripulantes de cada velero. Los personajes aparecen retratados de acuerdo con su nivel social, ricos todos ellos, atractivas las mujeres y en algún caso marcados por la tragedia, como una pareja de participantes que no pudieron embarcar porque en su camino se interpuso un infarto fulminante. La obra, escrita en tono de incisiva ironía, refleja la desinhibida forma de actuar de unos personajes que, en su mayoría, han hecho fortuna con métodos ilegales, o al menos nada lícitos. A bordo de los impecables y costosos barcos de recreo se disfruta de los rendimientos de marañas de corrupción, se practica el sexo sin apenas ocultarse, se mantienen relaciones de pareja que no deben trascender, una vez llegados a tierra, y se prescinde de los trajes de baño, no por falta de ellos precisamente. El autor utiliza un lenguaje carente de toda sutileza para contar los enredos que se ocultan en los camarotes y describir con detalle las escenas que tienen lugar en su interior, una de las actividades favoritas de los navegantes. La trama, en cuyo desenlace se incluye la detención de un exministro que desconoce por cuál de sus numerosos delitos se le reclama, reúne un conjunto de elementos argumentales bastante tópicos para ensamblar una acción cuyo principal atractivo es la belleza de los lugares donde está ambientada. Aunque técnicamente la narración fluye de modo ágil, la novela se encamina a un desenlace previsible a base de secuencias convencionales, salvo algún momento de verdadero humor. Los personajes que parecen sacados de una ?revista del corazón? son prototipos de una sociedad sin otros intereses que el dinero, el sexo y el placer sin trabas y en el colmo de la falsedad la regata se reduce a una breve competición para ver quien llega primero a la bocana del puerto. Entre fingimientos, engaños, vicios y palabras malsonantes, el lector encuentra escasos alicientes con que satisfacer su interés, en caso de que su propósito fuera encontrar en estas páginas algún indicio de literatura de auténtica calidad.
