Resumen
Este es el primer libro que Walser publicó, en 1904, con ilustraciones de su hermano. Sus páginas contienen la supuesta reproducción de unas redacciones escolares escritas por un estudiante, en unos cuadernos que la madre de éste habría entregado al autor al fallecer su hijo poco después de terminar sus estudios en la escuela. La obra remeda la escritura de un chico que tiene una visión del mundo sencilla y carente -lógicamente de experiencia- y contraste, y que expresa su parecer sobre cualquier tema con el desparpajo infantil e ingenuo de quien desconoce la vida. Muchos de los relatos se escriben como ejercicios escolares que esperan la nota del profesor y muestran el ambiente de un aula. Los breves textos están escritos con un estilo bello y describen las cosas hermosas de la naturaleza y sentimientos altos. El joven muestra una educación remilgada, propia de su clase burguesa, que trata con cierta repulsión la pobreza y todo lo que no esté a su altura. La naturaleza se contempla de modo romántico, como un ser benigno que exalta los buenos sentimientos y asombra y llena el corazón.
