Resumen
El día de Año Nuevo de 1872, en el pueblo de Tandil, una banda de gauchos armados, liderados por un oscuro personaje apodado Tata Dios, asesinó a treinta y seis inmigrantes de diversas nacionalidades: vascos, italianos, franceses y escoceses. La inesperada masacre causó alarma e indignación. Algunos trataron de explicarla como un grito de protesta de los gauchos oprimidos; otros, como un brote de fanatismo religioso fundamentalista e incluso como una conspiración para amedrentar a los extranjeros, una reacción xenófoba contra quienes ocupaban tierras y desplazaban al trabajador local. John Lynch , distinguido historiador inglés, biógrafo de Rosas, enmarca este episodio poco conocido en la larga historia de violencias de la frontera, y traza un panorama de la situación económica y social de la Argentina de aquel tiempo. Explica cómo se reprimió a los asesinos y cómo reaccionó el gobierno argentino ante las protestas británicas que, por un tiempo, empañaron las relaciones entre ambos países y desalentaron la inmigración de ese origen.
