Resumen
Ángeles Núñez nos hace partícipes de su asombrosa peripecia vital, marcada por la visión tremenda de los manicomios en los años 60 y su lucha, primero como religiosa y enfermera, después como médico-psiquiatra, para erradicar aquellos almacenes de seres humanos. Ahora es ella la que se autoanaliza, relatando los recuerdos de la infancia, el periodo de su adolescencia, su época adulta en Roma y el doloroso trago de abandonar la congregación, a la que siempre amó y sigue amando, para no enfrentarse a ella con sus ideas reformistas. Nos habla de su nueva vida como seglar, de su matrimonio y de cómo ha venido aplicando las nuevas terapias en las que siempre creyó. Al final de la lectura, uno queda invadido por un aura de paz y un imperioso deseo de amar la vida, por muy adversas que se presenten las circunstancias.