Resumen
Primer episodio de la serie narrativa protagonizada por Mila y Luna, dos niñas de diez años que viven en el barrio antiguo de una gran ciudad, donde hay antiguos palacios, plazas apartadas y callejuelas tranquilas. En este tipo de rincones urbanos es donde le gusta vivir a la Gente, el pueblo de las criaturas mágicas, que conviven con los Otros, los que carecen de poderes paranormales. Las protagonistas proceden de una familia de brujas y de otra de hadas, pero todas benéficas y, por tanto, dedicadas a trabajar juntas en la lucha contra los malignos, quienes se entregan a la magia negra. La obra narra cómo, ante una amenaza seria de este tipo, Mila y Luna son inducidas a hacerse amigas e iniciadas en su misión de luchar a favor del bien a pesar de sus pocos años. Se trata de un cuento fantástico, bien escrito, amable y cordial, que resulta muy entretenido gracias al acertado diseño de los personajes, al tono humorístico del estilo y al ritmo ágil de su desarrollo argumental, muy imaginativo pero también realista de fondo. Las ilustraciones son de muy buena calidad y realzan de modo muy expresivo la parte escrita que, a su vez, aúna con dignidad un propósito de amplia difusión comercial y cierto nivel de calidad literaria. El ambiente en el que se sitúa la trama refleja situaciones domésticas sólidas y estables de convivencia entre abuelos, padres e hijos.
