Resumen
Primera novela de una serie de relatos juveniles protagonizadas por un James Bond de quince años que vive en ella su primera aventura. Muertos sus padres empieza a estudiar en Eton, donde se enfrenta al hijo de un extraño millonario norteamericano, y va a pasar las vacaciones a Escocia, con sus tíos. En el tren conoce a un muchacho, experto en raterías, con el cual irá a investigar las misteriosas actividades del millonario, que resulta ser el dueño del castillo levantado en una isla del lago Silverfin, próximo a la casa de sus tíos, cuyas oscuras aguas esconden un terrible secreto. El autor presenta a su protagonista como un chico equilibrado y maduro, inteligente y despierto, deportista, afectuoso y buen amigo de sus amigos. Sus andanzas están repletas de peligros y emociones que se narran con todo tipo de detalles, incluidas algunas explicaciones de tipo científico o relacionadas con métodos de defensa personal que resultan adecuados para los gustos e intereses de los lectores a los que la obra se dirige. Como corresponde a la época en que se desarrolla la acción, no mucho después de terminada la segunda guerra mundial, el lenguaje está limpio de exclamaciones y vulgaridades y los protagonistas se comportan en todo momento de modo acorde con su edad. El ritmo del relato, aunque nunca vertiginoso, es siempre dinámico, el estilo está cuidado y la trama, bien elaborada y sin rebasar demasiado los límites de la verosimilitud, despierta interés y resulta entretenida.
