Resumen
Resulta sorprendente cómo Mabel Piérola ha podido pintar tantas cosas en tan pocas páginas. Porque en este libro hay muchas casas con muchas ventanas, mucha gente, muchos perros, muchos gatos, muchas flores, muchos bichos, muchas mariposas, muchos pájaros, árboles con muchas hojas y muchos frutos, y hasta una familia tan numerosa que, más que muchos, son una multitud. Bueno, muchas cosas.