Resumen
Manuel y Ramón, ex combatientes del ejército republicano en la Guerra Civil española exiliados en Francia, deciden, tras la victoria de los Aliados en 1945, incorporarse a las partidas comunistas que combaten desde el interior al régimen del general Franco.
A través de la frontera de los Pirineos descienden hacia el sur en busca de sus lugares de origen donde esperan que familiares y antiguos camaradas les presten la ayuda que necesitan para alcanzar sus fines. Sin embargo, la realidad se impone como barrera que los fugitivos no logran superar. Entre la crueldad y el odio de los vencedores y el temor cobarde de los vencidos, Ramón y Manuel son recibidos con hostilidad, acosados y perseguidos y, finalmente, obligados a regresar al exilio, heridos física y moralmente.
Ernesto Pérez Zúñiga (Madrid,1971) en lugar de una novela histórica, ha escrito un relato de exaltación lírica dedicado a los sentimientos nobles de los milicianos de la República democrática a los que se considera generosos héroes de la libertad. Los dos protagonistas luchan en inferioridad de condiciones contra los opresores, terratenientes, militares y curas, aliados contra la causa del pueblo. Los crímenes, asaltos y atentados en los que intervienen activamente los dos guerrilleros en fuga, se describen como actos de guerra contra un enemigo que no respeta la ley y la justicia. Los tópicos sobre el rencor, la miseria y la crueldad que se atribuye a las autoridades españolas de la década de 1940 contribuyen a crear un clima de violencia que adquiere en los episodios finales tintes melodramáticos reflejados con expresiones de cierta exaltación poética. La obra, centrada en el reflejo de los sentimientos de venganza, rencor y fracaso de unos personajes torturados que no esperan ni dan cuartel carece de argumento y se limita a una mera sucesión de episodios deshilvanados y carentes de sentido de difícil encaje en una trama coherente. En determinadas escenas oníricas, que transcurren rodeadas de las pesadillas de los personajes el sexo aparece como un medio de alcanzar los placeres que la realidad de una vida sin sentido niega a los seres humanos. La novela no responde en su contenido a un propósito testimonial objetivo, sino al deseo de reivindicar y justificar la violencia justicialista de los guerrilleros a las que se unen los protagonistas.
