Resumen
Nosotros, los de entonces narra cómo después de más de diez años sin haberse visto, seis amigos, tres mujeres y tres hombres de mediana edad, acuden a pasar juntos un fin de semana de verano en un hotel de Provenza. Tras este comienzo, la novela narra las conversaciones que mantienen los coprotagonistas, en las que recuerdan los tiempos de estudiantes en Madrid donde forjaron su amistad. Todos ellos se esfuerzan por recuperar la antigua confianza mutua, debilitada por el mucho tiempo en que apenas han sabido nada unos de otros.
Lo reducido de la acción externa, limitada al espacio del hotel, se compensa con las tormentas afectivas que este reencuentro provoca. Al reunirse, los de entonces perciben que ya no son jóvenes, que entre unos y otros ha habido silencios, engaños e infidelidades y que sus vidas han seguido cursos distintos de lo que proyectaban cuando tenían todo un futuro ante sí.
Marta Rivera de la Cruz parte de este planteamiento para desarrollar un argumento convencional, animado por una galería de tipos humanos representativos de distintos sectores sociales y de diferentes modos de entender la vida. De las tres mujeres, dos están ya divorciadas y otra en los trámites previos a estarlo, y de los hombres uno de ellos también está divorciado, precisamente de una de ellas, mientras otro, homosexual, se dispone a casarse con su novio. Tan solo el tercero, de situación económica más modesta, lleva años de vida conyugal estable. Cada uno de los personajes manifiesta su modo de pensar y afrontar los problemas cotidianos, a veces en medio de la violenta oposición de los demás. Sin embargo la calma se restablece pronto, gracias a que la buena educación y el renacido afecto que les unió en el pasado se imponen a súbitos arrebatos que conducen a ofender o ser ofendido. La trama apenas cuenta con elementos imaginativos, y el estilo, siempre en forma dialogada, poco elaborado y con un vocabulario reducido, acaba por resultar un tanto monótono. La autora ni describe ni adopta una posición definida ante las conductas de los personajes ni valora mejor unas que otras. Tanto la permisividad de la mayoría como la actitud de la pareja que permanece unida, se presentan como opciones elegibles, al igual que la alternativa entre homo y heterosexualidad.