Resumen
Cuarenta narraciones cortas y ochenta y cinco poemas dirigidos a cualquier persona de cualquier edad y cualquier país, que comparta con el autor la idea de que un niño es un adulto en potencia y éste, a su vez, siempre conserva algo del niño que fue. La selección se centra en autores del área cultural anglosajona nacidos en el siglo XIX, con pocas excepciones.
La obra es una mezcla de elecciones hechas tanto por el crítico profesional como por el lector voraz. Bloom ha seguido, para elaborarla, el doble criterio de los principios de la teoría literaria y de sus gustos personales, con el propósito de orientar a las siguientes generaciones, más que con la idea de elaborar un canon de clásicos para el siglo XXI. Quizá por eso no hay referencias biográficas sobre quién firma cada texto, que serían de agradecer aunque añadieran unas páginas a este ya extenso volumen. Ello obedece, tal vez, a que se proponga solamente el disfrute estético de una prosa brillante o de unos versos sonoros, relegando toda información sobre ellos a una búsqueda posterior. La calidad y variedad de las piezas integrantes de esta antología, en la que hay lirismo, humor, fantasía, realismo, misterio, etc., y el acierto general de las traducciones, proporcionan notable relieve a este libro que, en principio, gustará tanto a pequeños como a mayores.
