Resumen
El miedo se ha transformado en una fuente de obediencia compulsiva, y los grupos
especializados en la utilización del terror lo han erigido en una amenaza y en un arma
poderosa de destrucción. A su vez, en las manos de algunos mandatarios se ha convertido en
una clave y hasta en un "arte de gobernar". En el teatro, el miedo adopta numerosas
modalidades, atendiendo a sus diversos géneros (la tragedia clásica, la comedia de los Siglos
de Oro, el drama romántico, el teatro gótico, el teatro policíaco, la comedia macabra, el teatro
político). En la tragedia clásica, el miedo constituye un elemento primordial. La "catarsis", un
término que Aristóteles toma de la medicina y aplica a la tragedia, está basada
fundamentalmente en el miedo. Según este concepto aristotélico, la tragedia, mediante el
miedo, el temor y la piedad, realiza la "purificación" de las pasiones. La dimensión política del
miedo es la dominante en las obras reunidas en este volumen: "Panic" de Alfonso Vallejo, "No
perdáis este tren" de Luis Araújo y "Bagdad, ciudad del miedo" de César López Llera, tres
dramaturgos muy representativos de las tendencias más relevantes del teatro actual.<