Resumen
El forense de la ciudad de Londres es invitado a una fiesta, en la que le desafían a resolver en el plazo de dos semanas un misterioso asesinato cometido años atrás. Para ello el forense recurre a la ayuda de fray Athelstan, que, a la vez, tiene que investigar unos asesinatos cometidos en el convento de dominicos al que pertenece.
Situada la acción en el verano del año 1379, el autor dedica más tiempo a la descripción del entorno y de las penosas condiciones de vida de la población londinense que a las investigaciones propiamente dichas, lo cual resta interés a la intriga.