Resumen
Cuando las tres pequeñas ardillas, protagonistas de este cuento, abren la ventana nada más despertarse, descubren que todo está blanco porque por la noche ha nevado. Aunque a su padre no le hace mucha gracia salir al bosque porque prefiere estar calentito al lado de la estufa, sus hijos consiguen convencerle para que juegue con ellos. Y de tanto empujar el trineo consiguen que acabe sudando y hasta se anima para deslizarse colina abajo. El cuento está redactado de forma cálida y utilizando un vocabulario sencillo. Las ilustraciones son de gran calidad y complementan el carácter entrañable de la narración.