Resumen
Gemma es una chica normal y guapa, aficionada a nadar por las noches en la bahía próxima a su casa. La presencia de tres jóvenes de una belleza sobrecogedora, que la invitan al salir del agua y le suministran una extraña poción transforman su persona y su vida en algo oscuro y misterioso. En este primer libro de una serie de fantasía con buenas dosis de suspense y elementos paranormales, se traza una historia protagonizada por personajes adolescentes, cuyas vidas discurren entre amistades, romances y vivencias familiares en un pequeño pueblo costero cercano a Maryland, Estados Unidos, convertido en un escenario adecuado para una trama de siniestras sirenas. De lenguaje poco elaborado y demasiadas páginas llenas de diálogos banales, la acción se desenvuelve de modo lento, apuntando hacia un enigma que no acaba de materializarse hasta el último tercio del libro, donde en poco espacio irrumpen elementos sobrenaturales, desapariciones, escenas macabras, y todo un conjunto de hechos delirantes. Los personajes se presentan poco definidos, y como meros sujetos de lo que acontece, lo que provoca que la atención se centre en los sucesos y en el clima de misterio que la autora pretende crear. A pesar de la poca consistencia del argumento, resulta una lectura aceptablemente entretenida.