Resumen
El novelista argentino
Ernesto Mallo en
El hilo de sangre presenta a su emblemático comisario de policía Perro Lascano en una situación inédita. Tras un golpe de suerte que le ha enriquecido, ha abandonado el trabajo y recuperado un viejo amor así que su vida es apacible y tranquila, algo a lo que no está acostumbrado y la ocasión surge enseguida para Perro. Un asesino a punto de morir en un hospital carcelario dice saber quienes fueron los autores de la muerte de los padres de Lascano cuando él era niño. Los escasos datos de este testimonio revuelven algo que creía ya casi olvidado y decide hacer todo lo necesario para vengarse. Perro viaja constantemente de Buenos Aires a Barcelona en busca del paradero de los asesinos de sus padres que parecen estar escondidos bajo tierra. Sin embargo, lo que descubrirá Lascano acerca de su pasado es algo que nunca pudo imaginar.
Mallo exhibe una excelente técnica para el género negro con su prosa seca y sobria, sus diálogos entrecortados y su lenguaje porteño y malhablado que acompañan en todo momento una trama cruda y sórdida en bastantes ocasiones en la que los golpes y el abuso sexual van de la mano. Con alternancia temporal de capítulos en flashback se describen tristes trayectorias de reformatorios y prisiones; es también una novela de personajes que intenta apelar al rescoldo de los sentimientos de unos tipos desarraigados, demasiado duros y curtidos por los acontecimientos de la vida forma que ya carecen de escrúpulos. Desde el rotundo comienzo al imprevisible final Ernesto M. conduce al lector con ritmo implacable por un relato que refleja el lado más oscuro del hombre mientras se detiene en las múltiples crueldades de gente cuya única ley es la brutalidad y la violencia. Libro muy bien escrito pero con páginas que pueden herir la sensibilidad del lector.
