Resumen
Segunda entrega de la serie de fantasía protagonizada por Balsa, una joven lancera experta en artes marciales, de profesión guardaespaldas itinerante. Este episodio se sitúa en su país natal, del que tuvo que huir cuando tenía seis años a causa de una conspiración en la que peligraba su vida. Ahora, regresa para enfrentarse a su pasado y descubrir quién mató a su padre. Ambientada en un Japón feudal, bien estructurado y rico en detalles, tradiciones y usos sociales, la novela alterna recuerdos de la vida de Balsa con quien la salvó y entrenó como guerrera, con persecuciones y otras peligrosas aventuras relacionadas con las intrigas políticas y traiciones referidas a ella y a su familia. Con un estilo cuidado y descriptivo que consigue introducir al lector en la cultura japonesa de la época, a medida que avanza la historia se va tiñendo de un tono de fantasía con ribetes sobrenaturales, en los que se confunde la realidad con la ficción, en una combinación que se carga de misterio, y desemboca en la resolución de una trama de gran alcance, con la intervención de espíritus y otros seres del mundo mágico. Personajes fuertes y cercanos dan vida a una trama más compleja de lo que parece a primera vista, donde el honor y las creencias orientales están presentes en toda la narración. Aunque de lectura interesante y amena, quizá resulte algo confusa para el público más joven por los muchos personajes y nombres parecidos, y los detalles con que se recrea el mundo fantástico escenario de la acción.
