Resumen
María Vallejo-Nágera combina un relato histórico con la investigación de una trama policial en su nueva novela
La niña Juana. Todo arranca en Madrid cuando Tomasa, una empleada de hogar de sesenta años que trabaja en el chalet de una adinerada señora encuentra un día al llegar que han asesinado a la dueña. Lógicamente, la policía le toma declaración como testigo, y Tomasa, muy impresionada por el suceso ya que llevaba cuarenta años en el mismo oficio y lugar visita a una tía religiosa, ya muy anciana, llamada Sor Tránsito, en busca de consuelo y sosiego. Mientras se desarrolla la investigación del crimen, al parecer relacionado con la herencia de la fallecida, Sor Tránsito conversa con su sobrina y le cuenta una impresionante historia en torno a dos personajes de finales del siglo XV y XVI, en plena época del Cardenal Cisneros, los Reyes Católicos y el emperador Carlos V: la porquera niña Inés y Sor Juana de Cubas de la Sagra. La primera aparición de la Virgen a la niña Inés tuvo lugar en 1449, y debido a las habladurías del vecindario, la Virgen le otorgó una prueba física de que se trataba de algo verídico, se reconoció el hecho y se construyó un convento en Cubas de la Sagra. Más tarde, en 1481, nace Juana Vázquez en Azaña (Toledo); muy fervorosa desde pequeña, comenzó a tener visiones y éxtasis. Sus padres le buscaron un pretendiente pero ella tenía otros planes y, disfrazada de chico, se trasladó al convento de Cubas de la Sagra donde estuvo toda su vida. Juana fue testigo de varias apariciones de la Virgen, hizo milagros y llegó a ser abadesa. Tras muchas calumnias y sufrimientos se extendió su fama de santidad. A través de simpáticos y chispeantes diálogos, la autora reconstruye la trayectoria espiritual de estas dos mujeres y, a su vez, Sor Tránsito que en su juventud fue apasionada lectora de Agatha Christie, ofrece pistas a Tomasa sobre los posibles autores del misterioso asesinato.
La aurora ofrece una original obra relatada con sencillez y gracejo en la que la sorprendente vida de la niña Inés y Sor Juana se entrelazan con una novela negra. La doble historia, contada a través de dos voces, resulta ágil y amena. Vallejo Nágera incluye apéndices documentales y bibliográficos junto con fotografías del Convento de Cubas de la Sagra. En 2015 el Papa Francisco firmó el decreto de virtudes heroicas de Sor Juana.
